El autocontrol emocional consiste en gestionar nuestros sentimientos y comportamientos. A través del control de las emociones positivas y negativas podemos experimentarlas y expresarlas adecuadamente. Da igual la edad ya que es necesario en cualquier etapa de nuestra vida.
Sigue leyendo este post, porque te explicamos los beneficios que tiene mantener las emociones a raya. Además, te decimos algunos consejos para mejorar el autocontrol emocional. Si estás interesado en este ámbito, echa un vistazo al máster online en coaching psicológico.
Índice de contenidos
El autocontrol emocional vs. la impulsividad
¿Alguna vez te has guiado por un impulso sin hacer caso de la razón? A largo plazo la dificultad por controlar las conductas impulsivas generan otros comportamientos de riesgo. Esto sucede porque al tratarse de un impulso, la mente no aprende de lo sucedido. No lo interiorizamos y no somos conscientes de hasta dónde nos puede llevar esta falta de control. Ahora bien, no todas las conductas impulsivas tienen porque ser negativas. Algunas actúan como mecanismo de defensa y nos sirven como alerta de un peligro real.
Para controlar nuestras actitudes impulsivas es necesario tener autocontrol emocional. La clave está en la forma cómo interpretamos nuestras emociones. Según el modo en que reaccionamos frente a una emoción, nos condicionará en cómo actuará ésta sobre nosotros. Y eso no es todo ya que la mala regulación de las respuestas emocionales conlleva ansiedad o depresión. Por tanto, debemos prevenir y aprender a actuar antes que las emociones nos invadan. Saber identificar los síntomas, entender nuestro estado de ánimo y después proceder.
Beneficios del autocontrol de las emociones
Como hemos mencionado anteriormente, para controlar las emociones necesitamos conocernos a nosotros mismos. Como dijo Daniel Goleman, autor del libro Inteligencia emocional: “La habilidad de hacer una pausa y no actuar por el primer impulso, se ha vuelto un aprendizaje crucial de la vida”.
Además, el control que aplicamos sobre nuestras emociones tiene beneficios. Aquí te resumimos los más importantes:
- Mejora el bienestar emocional.
- Sube la autoestima.
- Aumenta la concentración.
- Ayuda en la toma de decisiones.
- Permite controlar el estrés en situaciones de bajo presión.
- Ayuda a mantener la calma y pensar con mayor claridad.
- Permite hacer frente a situaciones difíciles con eficiencia.
Consejos para saber controlar las emociones
Sabemos que mantener las emociones a raya es difícil. Hay ocasiones que es irremediable evitar un estado emocional negativo, ya sea tristeza, enfado o nervios. Si quieres corregirlo, aquí te dejamos unas cuantas técnicas que pueden ayudarte a detener o frenar alguna reacción negativa:
Reafirmación
Es una de las mejores estrategias para gestionar las emociones. Consiste en reducir el significado negativo de lo que ha provocado esa emoción. Aplícalo cuando la intensidad de tus emociones sea baja ya que tendrás tiempo para buscar un punto de vista distinto de la situación. Cuando veas que pierdes el control, piensa en todo aquello del cual te sientes orgulloso.
Distracción
Se trata de desvincularse de la emoción negativa y dirigir la atención hacia pensamientos neutrales. Suele funcionar en momentos puntuales para evitar perder los estribos. Esta técnica también acostumbra a utilizarse para calmar a los niños cuando tienen una pataleta.
Meditación
Meditar consigue disminuir a largo plazo la activación de la amígdala cerebral, encargada del control de las emociones y sentimientos. Por este motivo, meditar de forma habitual y respirar correctamente ayudan a prevenir pensamientos negativos, controlar la impulsividad y reducir la intensidad de las emociones.
Pospón tus preocupaciones
Si dejamos de preocuparnos por lo que nos inquieta durante unas horas, las emociones regresaran con una intensidad menor. Date permiso para preocuparte más tarde y desvía la atención hacia pensamientos positivos el resto del día. Tu mente estará en equilibrio.
Encuentra el por qué de tus emociones
A largo plazo lo que te ayudará es aprender a reconocer tus emociones y saber por qué te ocurren. No luches contra ellas y se honesto contigo sobre el por qué. Saber la verdad de tus sentimientos te ayudará a controlarte.